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Alfredo Guevara: sobre el periodismo y la objetividad


Tengo muchos años pero he pasado la vida entera militando a favor de una causa u otra. Muy joven era anarquista, después devine marxista, he sido siempre un libertario y lo voy a seguir siendo. 

Lo primero que quiero decir a partir de mi propia experiencia es que un periodista que no milite en lo que quiera no podrá ser jamás buen periodista. 

Puede ser un periodista a la usanza occidental de la cual formamos parte, de Occidente, de este mundo iniciado por los griegos y que ha llegado hasta nuestros días con algunas marcas desde entonces. 

Aunque evolucionando hasta los conceptos, y naturalmente para expresar los conceptos revolucionando la palabra entre ellas la palabra democracia.

Empiezo por hablar de militancia pero no estoy hablando de militancia partidista, estoy hablando de pasión. De creer en algo y entregarse a ese algo a toda costa. El periodismo que se enseña en las escuelas de periodismo de los países que conozco: Francia, España, Canadá. 

Bueno no voy a hablar de los nuestros de América Latina que también conozco pero que no pueden ser más subdesarrollados ni más miméticos de lo que son, de serlo más simplemente no serían.

En esas escuelas la palabra objetividad tiene un gran error: la objetividad suele ser una mentira. Yo tengo horror de ciertas palabras en el terreno que me estoy situando, tales son objetividad, prudencia…la objetividad siempre es una falsificación, la prudencia siempre es una falsificación y las dos vienen acompañadas, quiéranlo o no, de la mentira o de una mentira parcial. 

Hace apenas unas horas tuve un encuentro con uno de los periodistas más destacados y, a veces, no sé si voluntariamente o involuntariamente agresivo. Tuvimos una conversación muy cordial con este periodista sobre una de las manifestaciones de este tema: no la objetividad sino el equilibrio. Yo no le pedía ni remotamente parcialidad, semi-parcialidad, reconocía que no decía mentira, pero no decía tampoco verdad; decía en sus obras la verdad que le convenía a sus objetivos. Es decir militaba o lo hacía militar la publicación para la que trabaja. 

Cuando digo equilibrio no digo objetividad: un periodista tienen que abordar la objetividad tal y cual es, pero tiene que tener su objetividad, debiera tener su modo de ver, diría mejor.

De la conferencia de Alfredo Guevara
en la Facultad de Comunicación UH
(5 de mayo de 2010)

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